Corrupciones, Cineclub Revolución
Cuando pensamos en corrupción, es fácil remitirnos a las instituciones, particularmente aquellas del Estado, y considerarlo como algo que nos afecta, de lo que nos quejamos constantemente, pero que en más de un sentido no es nuestra responsabilidad. Específicamente, pensamos que estamos a distancia de las causas de la corrupción, aunque no de sus efectos. Creemos, y solemos afirmar que nuestras organizaciones, aquellas que regulan nuestro país son las corruptas, como si esto en esto no tuviéramos injerencia. Si acaso, llegamos a pensar – y a hablar – que en ese momento en que en la interacción con los organismos estatales, decidimos ...